París, 30 de enero de 2014,
Señora Presidenta de Universciences, querida Claudie Haigneré:
Señor Presidente de la Asociación de Museos y Centros para el Desarrollo de la Cultura Científica, Técnica e Industrial (MACSTU), querido Philippe Guillet:
Damas y caballeros, queridos amigos,
Es un placer para mí estar con ustedes hoy, después de Genevieve Fioraso y Louis Gallois ayer, para mostrar hasta qué punto, en todos sus componentes, el gobierno se ha comprometido, incluso movilizando sus herramientas innovadoras de financiación, en favor de la cultura científica, técnica e industrial. Sé bien que la fórmula misma de cultura científica, técnica e industrial, o el acrónimo un poco bárbaro de CSTI, puede suscitar un debate. Sin embargo, permítame detenerme en el primero de esos términos, la cultura. Porque es un reto cultural el que nos reúne hoy, un reto que da todo su sentido a estas palabras de Cédric Villani, uno de los grandes científicos franceses de hoy que también es escritor: «el poeta y el matemático hacen el mismo trabajo». Uno entrega un verso, el otro una fórmula: en ambos casos «recrean el mundo». Hoy estamos todos reunidos por lo que une al poeta y al matemático: dar sentido, para nuestros ciudadanos, al mundo que los rodea.
Hacer avanzar el mundo, nuestros artistas y científicos se apegan a él con constancia. Pero en la sociedad del XXIeme siglo basado en la economía del conocimiento, pero también a veces en el retorno de las irracionalidades, en la abundancia creativa de las iniciativas de la esfera digital, en el desarrollo de innovaciones colaborativas, en el intercambio de conocimientos científicos, técnicas e industriales ya no debe servir únicamente para hacer surgir a los artistas y científicos del mañana. Debe permitir compartir estos avances, pero también las dudas y los cuestionamientos propios de su gestión a toda la población. Porque tanto en ciencia como en arte quedan continentes inexplorados y aventuras por emprender. En esta dimensión emancipadora se funda el desafío cultural de la CSTI.
Quiero dar las gracias a los organizadores de este Foro Nacional de la Cultura Científica Técnica e Industrial y en particular a las Universciences que, asumiendo su misión de difusión del campo de la cultura científica y técnica, es, para mí, un actor ineludible de nuestras políticas culturales en general, en particular por sus acciones al servicio del acceso a la cultura para todos. Animando la política de los establecimientos públicos en favor de los públicos llamados alejados de cultura, y ya he tenido ocasión de saludar esta acción en el 10º aniversario de la misión Vivir juntos, y en favor de las personas con discapacidad, Universciences participa plenamente de nuestra política cultural.
La cultura científica, técnica e industrial, además de su dimensión humanista, es un verdadero reto democrático, el de permitir al ciudadano participar de manera informada en los debates de nuestro tiempo sin por ello reducirse a un papel instrumental que consistiría en: a través de la educación a hacer las políticas públicas más aceptables La cultura científica y técnica comporta también un reto económico como lo recordó Louis Gallois para quien es una palanca de la recuperación de nuestro país. Por último, es un elemento importante para el desarrollo de nuestros territorios y un poderoso vector de cohesión social porque afecta a públicos a veces alejados de las estructuras culturales y educativas.
Por eso me he comprometidojunto a Geneviève Fioraso para llevar esta ambición de valorización y generalización de la cultura científica.
Querer contraponer cultura científica y «la otra cultura» es una visión superada; se remonta a una época en la que no se hablaba de cultura sino de Bellas Artes. Esta distinción equivale en realidad a no reconocer lo que es la cultura hoy. Porque, de hecho, la ciencia, la técnica y la industria irrigan todo el sector cultural.
La ciencia está presente en losformación de los agentes de la culturaPienso en los diseñadores gráficos, restauradores, diseñadores y arquitectos que, en el marco de su formación, exploran los campos de la biología de la química, de la ciencia de los materiales, pero también de la robótica y de las nanotecnologías.
La investigaciónfunda la excelencia de losmisiones fundamentales de nuestras instituciones patrimoniales ya sea en materia de arqueología, de restauración de las obras o del tratamiento específico de las materias utilizadas en arte contemporáneo, que ilustran las fructíferas asociaciones con numerosos laboratorios de investigación.
La innovación técnica, la de los arquitectos o de los oficios de arte funda hoy la excelencia del saber hacer francés que nos envidian en el extranjero y que es uno de los puntos fuertes de nuestra competitividad económica.
Y es necesario insistir finalmente en los vínculos de la industria con la cultura cuando el estudio que realicé con Pierre Moscovici a principios de año muestra que el sector de la cultura representa el 3,2% del PIB, en particular debido a las sectores clave que son las industrias culturales : el cine, la música, la producción audiovisual y la imagen animada, pero también el digital y el videojuego, sector de innovación que creo que usted descubrió ayer, a través de la exposición dedicada a ello.
Todos vosotros, federaciones de educación popular, centros de CSTI, que tenéis el papel tan esencial de ser contrabandistas, mediadores para que los ciudadanos se apropien de la ciencia en su vida cotidiana, vuestra vocación es también transmitir la cultura en todas las dimensiones que acabo de evocar. Para muchos de nuestros ciudadanos, la cultura puede ser un punto de entrada a la ciencia.
En efecto, si la ciencia desempeña un papel importante al servicio de la cultura, la recíproca es verdadera: los artistas y la política cultural tienen un papel importante que desempeñar al servicio de la transmisión de la ciencia.
Los artistas son personas de creatividad, de innovación; son «permeables» si me permiten la expresión a la mayor inventiva. Por eso me congratulo de iniciativas como la de nuestra escena nacional de Grenoble, Francia, certificada en virtud de nuestra política nacional del espectáculo vivo pero que desarrolla un proyecto de centro de creación arte y ciencia gracias a la asociación fructífera con el CEA. Este centro permite a las necesidades de nuestros artistas conocer los avances tecnológicos necesarios para su proyecto artístico: quién sabe hoy que la innovación de la consola de juegos «WII», gran éxito comercial, ha sido iniciada por las necesidades de bailarines, para reproducir sus movimientos en el escenario?
Me alegro de la misión confiada al director de la Casemate de Grenoble por Geneviève Fioraso, para que las CCSTI sean lugares vivos, portadores de innovación, de creatividad y que se multipliquen las asociaciones con las instituciones culturales. Lo digital es la puerta de entrada. Esto es evidente en el ámbito del espectáculo vivo, pero también pienso, en la red, tan cercana a la gente, de la lectura pública. Uno de los retos de la red de bibliotecas-mediatecas es convertirse, en todo el territorio y aunque ya existen experiencias formidables, en el servicio público cultural digital de proximidad, el lugar de la orientación en los saberes ofrecidos por el digital. Incluido, por supuesto, el conocimiento científico y técnico.
El Gobierno ha decidido, con la aprobación de la Ley de enseñanza superior, renovar la asociación entre el Estado y las colectividades locales en materia de cultura científica y técnica. Las Regiones serán en adelante los coordinadores de las iniciativas de los territorios en este sector, lo que será una oportunidad para reforzar estos vínculos, lo más cerca posible de las realidades de cada territorio, con la lectura pública, política cultural descentralizada desde los años ochenta.
Poner en marcha la acción de mi ministerio al servicio de la cultura científica, técnica e industrial es responder a la importante cuestión de su presencia en los medios de comunicación. La difusión de la CSTI está integrada en el pliego de condiciones de las misiones de servicio público de France Télévision; y el nuevo impulso dado en marzo próximo a France 4 como cadena. dedicada a los niños podrá apoyar a France 5, la cadena de conocimientos, en la materia.
Sobre todo, la política cultural y la cultura científica y técnica tienen por fin la misma prioridad: la de la juventud. Es preciso redoblar los esfuerzos en favor de los jóvenes, movilizando nuevos enfoques pedagógicos y culturales.
Que los operadores de investigación puedan asegurarse, como le ha precisado la Ministra de Enseñanza Superior, de la intervención de cada laboratorio en al menos un establecimiento escolar o de juventud de su territorio participe plenamente en la acción que llevamos a cabo, colectivamente, con Vincent Peillon a través de la reforma de los ritmos escolares y con Valérie Fourneyron con quien he firmado esta semana un convenio de asociación en favor de las jóvenes generaciones.
Por eso vinculo muy naturalmente la cultura científica y técnica al gran proyecto que he hecho la prioridad de mi ministerio para el mandato: la educación artística y cultural.
Los actores movilizados en favor de la cultura científica y de la educación artística y cultural son muy a menudo los mismos y proceden de una misma filosofía: por la mediación, por la transmisión, quieren permitir a los más jóvenes de nuestros conciudadanos expresar su creatividad, representarse y comprender el mundo para poder actuar sobre él.
Se trata de asociarlos más estrechamente porque estoy convencida de que, apoyándose en la red de actores y competencias movilizados en torno al gran proyecto de educación artística y cultural, la cultura científica podrá llegar a un público más amplio. Del mismo modo, no dudo que los actores de la educación artística en todo el territorio podrán beneficiarse de proyectos colectivos como el proyecto ESTEEM que ustedes, los actores de la cultura científica y técnica, con la aportación de fondos de la Comisaría General de Inversiones, ha sabido crear un portal común que recoge todas las iniciativas y pone de relieve las buenas prácticas de los agentes de la cultura científica, industrial y técnica.
No me cabe duda de que estas dos ambiciones nacionales se alimentan mutuamente para llegar al mayor número posible de niños. Porque después de todo, lo que está en juego es el mismo, matemático o poeta, se trata de recrear el mundo.
Le doy las gracias.