Estoy muy contento de encontraros de nuevo para esta 13ª edición del
Festival de la ficción TV de La Rochelle. En 13 años, Quentin RASPAIL y
sus equipos han sabido hacer de esta cita una escena de exposición, de
encuentro con el público, pero también un foro de reflexión
profesional, como lo demuestra la organización de los Talleres de la Ficción y
el Gran Debate celebrado ayer. Quiero felicitarles por ello
calurosamente.
Es también una oportunidad para exponer las prioridades de mi
política audiovisual y hacer un balance de las obras en curso: la
el relanzamiento de la ficción, la financiación de la creación - especialmente en
reforzando los recursos y las ambiciones del sector audiovisual público - a la hora
donde convergen las pantallas, y donde el Paisaje audiovisual francés conoce una
reconfiguración profunda, que no habrá escapado.
Sobre este tema me permitiré reflexiones muy sencillas, para
recordar algunos fundamentos. Más allá de las aproximaciones entre
lo que más me importa es la diversidad de los contenidos
propuestas a los franceses, la calidad de las obras y de los programas que
encontremos todos los días en nuestras pantallas, conectados o no. La ley garantiza
esta diversidad, y nuestro sistema reglamentario permite orientar lo esencial
recursos hacia la creación original, patrimonial e independiente. Yo
por supuesto, estará atento a la instrucción que se haga de la
entre el grupo Canal+ y el grupo Bolloré por las autoridades competentes -
el Consejo Superior del Sector Audiovisual y la Autoridad de la Competencia - y
condiciones que se impondrán. Este marco, por supuesto, se
consideración de los equilibrios del mercado. Pero en mi opinión debe fundarse en
tanto sobre la calidad y la diversidad de los contenidos propuestos, su financiación,
y su capacidad para circular.
Estas palabras me llevan naturalmente al tema de la ficción televisiva.
Constituye un reto importante, como ya he señalado aquí mismo hace
dos años. La ficción es un componente clave de la identidad de las cadenas, pero
también un vector profundo de identificación para nuestros conciudadanos. Tenemos
necesidad de encontrarnos, de reconocernos, de ser conmovido e interpelado por
las historias que nos son contadas, y que son el punto de encuentro entre
una creación original, nuestras historias individuales, y las preguntas
colectivos y universales.
La ficción está, en definitiva, en el centro de los retos de la diversidad
cultural.
Su importancia económica es también esencial para el sector
audiovisual, ya que hablamos de casi 680 millones de euros
inversiones en producción en 2010, de más de 260 empresas de
producción, y un cuarto de la programación de canales gratuitos.
Por todas estas razones, solo puedo estar preocupado, contigo,
del posicionamiento de nuestra ficción nacional frente a las ficciones extranjeras, y
más particularmente la ficción americana. Esta última, con su
inventiva y su capacidad para movilizar medios considerables,
conquistar ampliamente el público francés. Las cifras son sorprendentes: no
solo la parte de la ficción americana en el conjunto de la ficción
se ha acercado al 50%, frente al 35% de la ficción francesa,
pero la ficción del otro lado del Atlántico realizó, en 2010, 65 de los 100 mejores
audiencias de todos los géneros, contra solo 7 para la ficción
francesa. Esta situación no está exenta de riesgos, mientras que la evolución de
modos de difusión permite una relación cada vez más directa entre los
titulares de derechos y el espectador.
Me refiero, por supuesto, a la televisión inteligente, que
reforzará la capacidad de los estudios estadounidenses para ofrecer directamente
contenidos a los consumidores a través de plataformas en línea sin
a través de los canales nacionales. Este riesgo de desinversión debería
hacer que las cadenas den prioridad a la producción de contenidos
identidades en lugar de comprar ficciones extranjeras. Por otra parte, elegir la
producción original, es darse los medios para distinguirse en este
universo de hiper-elección que será el de la televisión conectada.
Confío en la capacidad de los diferentes actores de nuestra ficción
nacional para adaptarse a esta nueva situación. Como ha demostrado el
debate» organizado ayer en el marco del festival, los problemas ya están bien
identificados y muchas pistas están abiertas. Algunas son
innovadoras, como la constitución de «células de creación de pilotos de
series» que se ofrecerían a las cadenas. En otros, tales como
la mejora de las relaciones entre autor, productor y difusor,
avances concretos ya se han registrado, con la firma en julio
último de la Carta del Desarrollo, para la cual France Télévisions
tuvo un papel de liderazgo, que quiero saludar.
Las tradicionales conferencias de regreso organizadas por los
canales de televisión en sus parrillas de programas muestran así como una
se ha prestado especial atención a ciertos formatos como la ficción
diario. Fenómeno reciente, las «nuevas cadenas» de la TDT
ahora encargan sus propios proyectos de ficción. Aunque
inversiones en producción siguen siendo marginales en relación con
cadenas históricas, estas cadenas participan en un nuevo modelo de
creación. Se inscriben en un marco ahora unificado y renovado
de obligaciones de producción.
Los decretos «producción» adoptados el año pasado permitieron
evolución de las normas de contribución a la financiación de la producción de
la parte del conjunto de los editores de servicios audiovisuales:
canales TDT, cable, satélite y ADSL, así como
Servicios de medios audiovisuales a la carta (SMAD).
Más allá de esta larga reforma de las obligaciones, he encargado
Pierre Chevalier, Sylvie Pialat y Franck Philippon para reflexionar sobre el
renovación de la ficción francesa, y en particular a los medios de mejor
garantizar la financiación de las fases de escritura y desarrollo.
Los trabajos iniciados por esta misión avanzan, progresivamente.
La carta para el desarrollo de la ficción, firmada entre los
organizaciones de productores, autores y Francia televisiones, y
acabo de mencionar, enmarca la política del grupo público en la materia:
desea felicitar a cada uno de sus signatarios y alentar a otros a que
unirse al movimiento. Esta carta es un acto importante para el
renovación de la ficción y para suscitar el efecto de arrastre que el
servicio público puede tener, por su ejemplaridad, en este campo.
La misión Chevalier también proponía pistas para renovar
los dispositivos de apoyo del Centro Nacional de Cine e Imagen
animado. Los equipos de Eric Garandeau, que está con nosotros esta mañana,
llevan a cabo un importante trabajo de concertación para su aplicación.
Este trabajo ya ha dado sus frutos con la reforma del fondo de ayuda a
la innovación, destinada a favorecer la asunción de riesgos artísticos y el apoyo
a los autores y productores en fases anteriores de la producción. La redistribución de
estas ayudas, incluyendo las etapas de «concepto» y «reescritura» deben
permitir un control más fino de las ayudas de que disponen, en particular, los
autores.
No ignoro que el camino que queda por recorrer sobre los demás
trabajos en curso, ya se trate del apoyo al desarrollo con
la apertura del dispositivo de anticipos o la reforma de las ayudas a
la producción de ficción, en su variedad: serie llamada «low cost»,
coproducciones internacionales, series recurrentes. Apelo a la
responsabilidad de todos para participar en esta concertación, y
para finales de este año.
Pero más allá del CNC, la renovación de la ficción, y su financiación,
también pasa mucho por el servicio público de televisión. Yo
quisiera terminar con estos puntos, porque me parece que en el
contexto presupuestario que conocemos, cómo los recursos
de Francia Televisiones y de Arte Francia se reforzaron envía un signo
fuerte con respecto a la creación, y los profesionales que son. Tengo
garantizar que los nuevos Contratos de objetivos y de
los canales públicos sean ambiciosos e innovadores, con
recursos para hacer frente a estas ambiciones.
Por lo que se refiere a France Télévisions, el proyecto de contrato de objetivos y
de medios 2011-2015, sobre el que se está consultando al Parlamento
y que deseamos firmar antes de finales de año, consagra el papel
motor que debe desempeñar el grupo público en materia de innovación - que
innovación en formatos, escritura o modos de difusión.
Renueva el compromiso financiero de la empresa en beneficio de la
producción de obras patrimoniales. Se prevé que France Télévisions
invierte al menos 420 millones de euros al año en la creación audiovisual
patrimonial a partir de 2012. Combinado con las obligaciones del grupo
calculados según la evolución de su volumen de negocios, se trata de una
garantía y un paso importante con respecto a los 391 millones de euros previstos en 2011 por
el Contrato actual.
En cuanto a Arte France, como usted sabe la cadena
conoce desde hace algunos años una erosión de sus audiencias. Pero el
nuevo Contrato de Objetivo y Medios de Arte marcará el apoyo que
aportamos a la ambición de relanzar la cadena y nuestro compromiso con
este singular modelo de televisión. Arte se beneficiará en 2012 de una
dotación pública de 270 millones de euros, lo que representa un aumento excepcional del 7,3% por
informe a 2011.
El modelo de Arte sigue de actualidad en un contexto de crisis
financiera que pone a prueba la solidaridad europea y, para
su ambición, debe poder dirigirse a un público más amplio. El Estado apoya
con voluntarismo este plan de relanzamiento de ARTE. El nuevo COM
2012-2016, en fase de finalización, prevé para este período una
aumento medio anual del 3,8% de los recursos públicos.
El objetivo principal de Arte es claro: reconquistar a su público sin renegar
las características que hacen su singularidad, siendo una cadena cultural
europea, creativa y exigente en la calidad de sus programas.
Concretamente, una red de programas totalmente renovada, fuertemente
día y más accesible al público en general
lugar a partir de 2012. Estará salpicada regularmente de programas
eventos de alta calidad. El proyecto de COM 2012-2016 de Arte
confirma por otra parte los compromisos de la cadena en la ficción: de una
manteniendo los compromisos financieros de Arte France en la
producción de obras audiovisuales europeas, por otra parte en
reafirmando el compromiso de la cadena en el desarrollo de los 3 tipos
de ficciones (unidades, series y miniseries).
Dos objetivos fuertes del proyecto de COM 2012-2016 merecen estar aquí
subrayados.
En primer lugar, se hará un esfuerzo especial de innovación para
programas especialmente diseñados para Internet. Usted sabe, Arte es
pionera en la producción de «web-ficciones» y de «web series». De
nuevos tipos de programas serán experimentados, asociando desde el
diseño de la antena e Internet. Para algunos de estos programas, el público
podrá participar en el proceso de creación aportando sus ideas e incluso sus
propias creaciones audiovisuales.
En segundo lugar, Arte favorecerá la emergencia de nuevas escrituras
audiovisuales, de ideas originales y de obras audaces. Para ello, la
se basará en los convenios de desarrollo que representen, a
Horizonte 2016, 4% del presupuesto de producción. En paralelo, Arte France
seguirá apoyando las obras unitarias originales en cortometrajes y
en documentales.
Estos ejes estratégicos, a través de los cuales Arte pretende marcar su
no pueden hacer olvidar las demás obligaciones de la
cadena de ficción, a saber:
- el refuerzo de la coproducción internacional,
especialmente franco-alemana;
- La difusión de las series europeas elegidas entre las
mejores y más creativas;
- La búsqueda de series de calidad procedentes de países
creaciones son poco conocidas en Francia;
- O el apoyo a las primeras obras.
Así que tengo plena confianza en la capacidad de Arte para recuperar
su público, mientras que sigue jugando su papel para apoyar la ficción de TV y
trabajar en la renovación del género, mediante la innovación, la originalidad y
la ambición cultural que hacen la singularidad de esta cadena franco-alemana.
Como comprenderá, mi compromiso es total para responder a
desafíos a los que se enfrenta hoy la ficción francesa. En un
entorno cambiante, hecho de convergencia de los medios de
recomposición del PAF, mi ambición es ofrecer un marco de expresión y de
desarrollo estabilizado, fortalecido, a todos los creadores y actores de
audiovisual. Espero que juntos podamos hacer frente a estos retos, y
pensar juntos la ficción televisiva del mañana - una ficción rica
de originalidad, de independencia, de renovación constante.
Le doy las gracias.