Asociaciones y talleres de voluntarios
El Ministerio de Cultura está acompañado en su acción por asociaciones de defensa del patrimonio y por las asociaciones organizadoras de obras de voluntarios que contribuyen al conocimiento y a la conservación de los monumentos históricos, sitios patrimoniales notables y patrimonio cultural en general.
Asociaciones
Varios miles de asociaciones despliegan su actividad para la salvaguardia del patrimonio monumental. Algunos de ellos son propietarios de monumentos históricos. Otros reúnen a los amigos de tal o cual monumento de renombre, o se dedican a la defensa de un edificio amenazado. Las sociedades científicas, a nivel nacional o local, son un poderoso vector de conocimiento de los monumentos y sitios.
Estas asociaciones son socios privilegiados del Estado. Son escuchadas, a menudo seguidas en sus propuestas. Se ha instaurado progresivamente un diálogo fructífero; se reconoce su papel y se aprecia su acción.
Es el caso, en particular, de siete asociaciones nacionales reconocidas de utilidad pública y fundación que participan en las reflexiones de la Dirección General de Patrimonio y Arquitectura en el marco de la agrupación nacional de información y concertación sobre el patrimonio, creado en 2005 y renovado en 2016 por cinco años. Esta agrupación tiene por misión favorecer la concertación y los intercambios de información entre el Estado y las asociaciones nacionales reconocidas de utilidad pública, de salvaguardia y valorización del patrimonio construido y paisajístico. Sus reuniones permiten al Estado presentar los proyectos de ley y de textos reglamentarios y plantear todas las cuestiones relativas a la conservación del patrimonio monumental.
El Ministerio de Cultura ha establecido una asociación con algunas de estas asociaciones nacionales firmando con ellas un convenio plurianual o anual relativo a proyectos que les son específicos pero conformes al interés general. Aporta entonces un apoyo financiero a las acciones que llevan a cabo: organización de formaciones y talleres de voluntarios, publicación de libros y revistas técnicas, sensibilización, organización de congresos o coloquios cuyo objetivo sea precisamente la protección o la promoción del patrimonio, o patrocinio de concursos.
Por otra parte, desde la Ley de 7 de julio de 2016 relativa a la libertad de creación, la arquitectura y el patrimonioel Código del Patrimonio concede un lugar esencial a las asociaciones en las instancias nacionales y regionales del patrimonio, al igual que a los representantes de la administración, a los representantes locales y a las personalidades cualificadas. Así, las asociaciones nacionales del patrimonio constituyen uno de los cuatro colegios de cada una de las 7 secciones de la Comisión Nacional de Patrimonio y Arquitecturay de las tres secciones de las comisiones regionales de patrimonio y arquitectura.
Medios de intervención
Esta política es aplicada por la Dirección General de Patrimonio, la red de direcciones regionales de asuntos culturales, que actúan en estrecha colaboración con las colectividades territoriales y los agentes culturales regionales y otros servicios del Estado.
El Ministerio de Educación, Juventud y Vida Asociativa ha dedicado un sitio a asociaciones.
Asociaciones de propietarios de monumentos históricos
Las asociaciones de salvaguardia del patrimonio
Las asociaciones de trabajo de voluntarios
El Ministerio de Cultura fomenta desde hace muchos años, mediante la aplicación de un apoyo financiero y técnico, las obras de voluntarios de restauración del patrimonio organizadas por las asociaciones. Mediante su movilización en torno a acciones concretas, pretende favorecer la sensibilización de los jóvenes para la salvaguardia del patrimonio arquitectónico nacional y prepararlos para un ejercicio de ciudadanía.
En 2020, el importe total de las ayudas concedidas por la administración central del Ministerio de Cultura a las tres grandes asociaciones nacionales: «Union Rempart», «Chantiers Histoire et Architecture Médiévales - CHAM» y «Club du Vieux Manoir»Para la organización de 210 cursillos de formación y talleres de voluntarios destinados a más de 2.100 alumnos, se elevaron a cerca de 500.000 €.
Desde 1980, la asociación C.H.A.M interviene en favor del patrimonio construido en metrópolis y en ultramar. La asociación organiza talleres de restauración con voluntarios o voluntarios en misión de Servicio Cívico Universal, durante las vacaciones o durante todo el año. La asociación contribuye también a la Educación para el Patrimonio, especialmente entre los grupos escolares, ofreciendo talleres de sensibilización sobre el patrimonio.