En 30 ediciones, el festival Visa pour l'Image, que se celebra en Perpiñán, ha sabido imponerse como el mayor evento del fotoperiodismo, que acoge a profesionales de todo el mundo. Testigo de los profundos cambios del sector del fotoperiodismo, este festival ejemplar siempre ha sabido defender una visión comprometida y humanista del oficio de fotógrafo. En un momento en que las noticias falsas aceleran su despliegue, el festival Visa for Image recuerda hasta qué punto la calidad de la información y la libertad de prensa son esenciales para la democracia.

En un contexto general de crisis de los medios de comunicación, la profesión de fotoperiodista está en precariedad creciente desde hace varias décadas, el número de tarjetas de prensa atribuidas a fotógrafos se ha reducido a la mitad desde 2000. Esta situación es el resultado de los profundos cambios en el sector de la prensa, la revolución digital y la reconfiguración del mercado de la fotografía en torno a grandes actores internacionales. 

Françoise Nyssen expresó su voluntad de que los fotógrafos expuestos sean remunerados desde esta edición de Visa pour l'Image.

Frente a esta profesión amenazada, el Ministerio de Cultura ha iniciado negociaciones con las empresas de prensa para que los editores se comprometan individualmente a respetar buenas prácticas profesionales, en particular el pago de las facturas en los plazos legales. En caso de incumplimiento, las ayudas directas del Estado podrán suspenderse o anularse en parte. Estas negociaciones culminaron en la firma de un primer convenio marco a finales de julio. El objetivo es que todos los acuerdos marco con las empresas de prensa se firmen a finales de año. Esto también permitirá a cada editor asumir los compromisos suscritos por los sindicatos profesionales en el marco del código de buenas prácticas profesionales firmado en julio de 2014 (en particular: respeto de los créditos fotográficos, libertad de rechazar la sindicación, preservación de los metadatos).

Françoise Nyssen, que hace de la defensa de los fotógrafos y de las condiciones de ejercicio de su oficio una prioridad de su acción, deseó mantener la duplicación del fondo de apoyo a la fotografía documental (gestionado por el CNAP)de 150.000 euros para los años 2018-2019.

Por último, Françoise Nyssen ha manifestado su deseo de que las dificultades concretas del sector puedan debatirse en el marco del Parlamento de la fotografía. Este comenzará sus trabajos en el otoño y abordará, en particular, en estrecha relación con la Comisión de la tarjeta de identidad de los periodistas profesionales (CCIJP), la cuestión de la atribución de la tarjeta de prensa a los fotoperiodistas.