Señoras y señores:

Queridos amigos:

Muchas gracias por venir a esta conferencia de prensa.

El presupuesto que les presento para 2016 va en aumento, no lo ignoran. Ya lo había anunciado en julio. El Primer Ministro dio su palabra y hoy se ha cumplido.

El año próximo, los créditos dedicados por el Estado a la cultura y a la comunicación aumentarán, pues, en un 2,7% con respecto a la ley de finanzas 2015, es decir, 190 millones de euros más que este año. El presupuesto del Ministerio alcanzará de hecho 7,3 millones de euros en 2016.

Orientar al alza la contribución de la Nación a la vida cultural de nuestro país es siempre un acto importante. En el período que estamos viviendo, veo mucho más.

En un momento en que estamos decididos a mejorar las cuentas públicas, es una señal clara de que la cultura es una de las prioridades del gobierno.

En un momento en que Francia es trabajada por corrientes profundas, que nos alejan unos de otros, es la señal de una convicción fuerte.

La convicción de que frente al mundo que viene, el repliegue en uno mismo no es la solución.

La convicción de que la cultura y los medios de comunicación ofrecen una parte de la solución.

Porque la cultura es a la vez ese espacio que nos une y ese vínculo que nos libera.

Porque al abrirnos más a nosotros mismos, la cultura nos abre también más a los demás.

Porque una prensa libre, que tiene los medios para actuar con total independencia, es absolutamente fundamental para la vida democrática.

Nuestro presupuesto para la cultura en 2016 es, pues, el presupuesto de Francia después de «Charlie».

El presupuesto de una Francia que sabe apoyarse en la cultura para avanzar, inventar, innovar y preparar el futuro.

De una Francia que está orgullosa de sus artistas y que se esfuerza por hacer crecer la abundancia creativa que hace su fuerza, abriéndola aún más a los jóvenes y a la juventud.

De una Francia que sabe que tendrá más confianza en sí misma cuando sus ciudadanos puedan participar en la vida cultural.

Este presupuesto no solo está orientado al alza para 2016, porque la cultura y los medios de comunicación son una prioridad del gobierno, sino que también es la traducción concreta de las prioridades que he dado al Ministerio: el acceso de todos a la cultura, la creación, la preparación del futuro.

En él se presta especial atención a la juventud, que es la primera preocupación del Presidente de la República.

También nos permitirá aplicar nuevas medidas, inscritas en el proyecto de ley para la libertad de creación, la arquitectura y el patrimonio, que presento esta semana a la Asamblea Nacional.

Todo estará preparado para que la vida cultural de los franceses cambie.

Reforzar el acceso de todos a la cultura es nuestra primera ambición y nuestro primer compromiso.

Hemos dedicado una parte importante del esfuerzo presupuestario: desde el comienzo del quinquenio, los créditos habrán aumentado en un 31%: 75 millones de euros en 2012, frente a casi 100 millones de euros en 2016 - ya se trate de educación en las artes y la cultura, de los conservatorios, de la acción en los territorios, junto a las colectividades territoriales, y en particular hacia los públicos más alejados de la cultura. Es un 20% más que el año pasado.

Nuestra prioridad en este ámbito es la juventud. Usted sabe que la educación artística y cultural será afirmada en la ley como un objetivo principal de las políticas culturales. He querido, también este año, que experimentara una progresión fuerte, para manifestar la importancia que le concede el Gobierno. Por lo tanto, la parte del presupuesto que le dedicamos aumentará un 34% con respecto a 2015 para alcanzar los 54,6 millones de euros - es más del 80% con respecto a 2012. Estamos cumpliendo nuestro compromiso.

Este compromiso tiene consecuencias muy concretas. Al reservar a los niños y a los públicos más alejados de la cultura el acceso al Museo del Louvre, al Museo de Orsay y al Palacio de Versalles el día de cierre, les ofrecemos también un mejor acceso a las obras y excelentes condiciones para descubrirlas. Este esfuerzo de apertura, que fue un compromiso del Presidente de la República, está financiado por mi Ministerio. Se crearán gradualmente puestos en esos establecimientos para que esa apertura sea posible.

Reforzar el acceso de todos a la cultura significa también apoyarnos en los lugares de formación y de descubrimiento - y pienso en particular en los conservatorios. El Estado estará de nuevo a su lado. 13,5 millones de euros se les dedicarán en 2016. Son 8 millones de euros más que en 2015. Queremos, en particular, que haya una mayor diversidad de disciplinas enseñadas: esto está inscrito en el proyecto de ley relativo a la creación.

Reforzar el acceso de todos a la cultura es velar por una mayor diversidad de las disciplinas enseñadas, pero es más ampliamente abrirnos a proyectos ambiciosos, que tienen en cuenta las prácticas actuales para repensar el acceso a la cultura. Este es, como saben, el objetivo del plan EAC, que contará con 4,5 millones de euros de créditos suplementarios.

El proyecto Demos es un buen ejemplo de estos proyectos que parten de las prácticas actuales, y en particular de las prácticas aficionadas. En efecto, favorece el acceso a la práctica musical en la orquesta, para los niños que viven en barrios de la política de ciudad o en zonas rurales. El equipo que lo pilota, en Ile-de-France, en Isère o en l'Aisne, hace un trabajo formidable que quiero saludar hoy. Los apoyaremos aún más aumentando nuestra contribución a su proyecto en 1,5 millones de euros.

Reforzar el acceso de todos a la cultura significa, por tanto, prestar una atención particular a los territorios y a los habitantes que se sienten ilegítimos en lugares de cultura o que están más alejados de ellos. Este es, por ejemplo, el objetivo de los contratos territoriales-lectura, cuya dotación hemos querido duplicar. En particular, permiten financiar proyectos de lecturas públicas en las mediatecas.

Reforzar el acceso de todos a la cultura significa, por último, prestar especial atención a los medios de comunicación de proximidad. Ofrecen una visión diferente y valiosa de la actualidad. La financiación del fondo de apoyo, creado este año, se perpetuará el año próximo.

El segundo compromiso que he asumido es el de reforzar el apoyo público a la creación.

También en este caso, nuestros créditos han aumentado: aumentarán en 12,7 millones de euros con respecto a 2015 para alcanzar 400 millones de euros [de 15 millones de euros con respecto al importe previsto en el trienio para 2016]. A estas financiaciones dedicadas al espectáculo vivo y a las artes plásticas, hay que añadir también el crédito de impuestos cinematográficos, cuyo importe se multiplicará por dos para alcanzar cerca de 100 millones de euros. Ambos persiguen el mismo objetivo: hacer que Francia siga siendo una tierra de creación, abundante y viva. Una tierra de creación diversa y renovada, a imagen de nuestros artistas. Un país donde el arte y la cultura crean empleo y contribuyen al desarrollo de nuestro país y a su proyección en el mundo.

Una vez más, nuestra prioridad es la juventud. Inicié, como ustedes recordarán, las Asambleas de la Joven Creación la primavera pasada. En junio, sus participantes me presentaron una serie de propuestas para mejorar, en particular, las condiciones de trabajo de los jóvenes artistas y su inserción en el mundo del arte y la creación.

A partir de enero de 2016, el Ministerio financiará medidas resultantes de estas obras, por un importe de 7,1 millones de euros.

Vendrán a consolidar el empleo artístico y ayudarán a la renovación de las generaciones y de los estéticos. Por lo tanto, se dedican principalmente a las compañías y a los conjuntos independientes, y refuerzan sus relaciones con los lugares etiquetados y los lugares intermedios 

Pienso en particular en el acompañamiento artístico y en los terceros lugares, cuyo papel en materia de localización artística es esencial (2,5 millones de euros), en el desarrollo de las residencias (3 millones de euros), o en el acompañamiento del desarrollo de los jóvenes creadores, a través de fablabsviveros artísticos apoyados en las escuelas de educación superior cultura, o plataformas web de recursos (1,6M€).

Por otra parte, estamos preparando la creación de un nuevo lugar, que será emblemático de la política que sigo en favor de la creación, de la juventud y del acceso de todos a la vida cultural. Me refiero, por supuesto, al proyecto Medici Clichy-Montfermeil. Me había comprometido a que ya fuera visible y presente en el territorio desde enero próximo. La misión está trabajando en ello. Financiaremos su prefiguración por un millón de euros. Se trata de un verdadero proyecto de futuro, que hace visible la creación y las prácticas culturales tal como se perfilan hoy.

Puesto que nuestra prioridad es la creación joven, nuestro apoyo va también a su formación. Para apoyar la creación del mañana, necesitamos escuelas reformadas, cada vez más dinámicas y abiertas al mundo. Nuestro objetivo es, en particular, que los profesores de la red de enseñanza superior cultural accedan al estatuto de profesores-investigadores. Esto se hará para nuestras escuelas de arquitectura a partir del próximo año, lo que creará 30 puestos adicionales.

Debemos también a los futuros artistas que preparan su ingreso en estas escuelas vivir en mejores condiciones, y tener acceso, en particular, a la seguridad social estudiantil, a becas y a una vivienda. Todo ello está consagrado en el proyecto de ley creado, con el reconocimiento de clases preparatorias públicas en las escuelas de arte. Algunas ya están trabajando en ello.

Una abundante creación artística beneficia, por supuesto, a la difusión de los territorios, a su competitividad y a su desarrollo. Es también el caso del cine, cuyo dinamismo se basa en profesionales y empresas cuyas competencias ya no son necesarias. La mejora del crédito fiscal cinematográfico permitirá apoyarlos más y reubicar los rodajes en nuestro territorio. Por tanto, beneficiará al empleo y a la actividad. Recuerdo que 1 € de crédito fiscal genera 11 € de inversión en el territorio, y 3,6 € de ingresos fiscales y sociales para el Estado.

En 2016, el crédito fiscal estará abierto a las obras de gran dimensión cultural, que se rodan en una lengua distinta del francés por razones artísticas, así como a las producciones ambiciosas de animación o de efectos visuales, que están orientadas hacia el ámbito internacional. A principios de este mes anuncié que estaba trabajando en ello y ahora se ha completado.

Se prevé un aumento del 30% para las obras cinematográficas rodadas en lengua francesa, las películas de animación y las ficciones con efectos visuales fuertes.

Por último, el límite máximo de crédito fiscal para una misma obra cinematográfica se aumentará a 30 millones de euros en lugar de los 4 millones de euros actuales.

Todos tenían el rodaje de Valeriano en cabeza. Hay muchos otros. Con este nuevo dispositivo, Jimmy P., Psicoterapia de un indio de las llanuras de Arnaud Desplechin o Personal Shopper de Olivier Assayas, podrían haber sido rodados en Francia. Esta medida beneficiará a algunas películas de gran presupuesto, que movilizan a las industrias más avanzadas de nuestro sector del cine, pero también a producciones de menor presupuesto, con una fuerte ambición artística.

Por otra parte, los medios del CNC se estabilizarán en 672 millones de euros. De acuerdo con los compromisos del Gobierno, no habrá ningún límite máximo de los impuestos recaudados en el mercado de la radiodifusión audiovisual, y no habrá ninguna reducción. El mantenimiento de los medios del fondo de apoyo al cine, al audiovisual y al multimedia permitirá financiar las acciones en favor de la ciudadanía y del servicio cívico, prioridad del Presidente de la República, el apoyo a la distribución de las películas, así como las ayudas automáticas y selectivas que permiten estructurar los sectores franceses del cine y del audiovisual y apoyar su diversidad.

Este año celebramos el 120 aniversario de la primera proyección de la película en París. Es un aniversario que celebran hoy los miembros de la Federación Nacional de Cines Franceses, reunidos en Deauville, a quienes saludo. Nos mantenemos fieles a ese lugar tan especial que ocupamos en la historia del cine, del que estamos tan orgullosos. Con las elecciones que hacemos, Francia seguirá imponiéndose en el futuro como una de las grandes naciones de la creación cinematográfica.

La prioridad dada a la creación se refiere finalmente a la música. En 2015, el aumento del límite máximo del impuesto asignado al Centro Nacional de la Canción, las Variedades y el Jazz fue una señal importante para el sector de la música grabada.

En 2016 iremos más lejos.

El plan SMAC se completará con más recursos de los previstos en su lanzamiento en 2011.

También apoyaremos a aquellos que se comprometen a favor de la creación joven y la diversidad musical, gracias a la prórroga del crédito fiscal fonográfico.

También apoyaremos a las pequeñas discográficas en la adaptación digital de su modelo, manteniendo el fondo de apoyo a la innovación, del que también podrán beneficiarse las pequeñas plataformas. 

Esta mutación del digital ya está en marcha desde hace tiempo para la música. Mañana será un reto importante para el conjunto de la cultura. Debemos dotarnos de los medios para sacar lo mejor de ello. Es un trabajo a largo plazo.

Estaremos al lado de los profesionales del sector musical para reforzar los medios de apoyo a la exportación de la música francesa. Para desarrollar una política coordinada y ambiciosa, nuestra financiación en la Oficina de Exportación de la Música Francesa se incrementará en medio millón de euros.

Precisamente mi tercera ambición es darnos los medios para entrar en el mundo que viene. El proyecto de ley sobre la creación responde en parte - pienso, por ejemplo, en una distribución más equitativa de los ingresos del digital y en el trabajo de clarificación de las relaciones entre los artistas intérpretes, los productores y los difusores, o entre los diferentes actores del cine.

Estas transformaciones, para que sean justas y equitativas, debemos dotarnos de los medios para acompañarlas cuando ya están en marcha, y prepararlas cuando se perfilan. Este es el tercer pilar de este proyecto de presupuesto.

Prepararse para el futuro es garantizar que todos los actores tengan la visibilidad a medio plazo que necesitan para sus financiaciones. El importe de los créditos delegados a los DRAC, aumentará un 2,2% hasta alcanzar los 780 millones de euros en 2016. Es la garantía de que la reorganización de las direcciones regionales del Ministerio, afectadas por la reforma territorial, continuará con medios preservados. Es también una garantía de confianza mutua y de serenidad hacia nuestros socios, empezando por las colectividades territoriales, que contribuyen a hacer vivir con nosotros la cultura en toda Francia.

Este es también el sentido de los pactos culturales que ya he firmado con unas 40 comunidades desde principios de año - el último en Gennevilliers la semana pasada. Todas las que se comprometan a mantener sus créditos para la cultura en los próximos tres años podrán contar también con una financiación del Estado mantenida al mismo nivel. Pactos, habrá otros, con medios reforzados. Es también la prueba de que la cultura es siempre una opción política.

Preparar el futuro es, a continuación, garantizar que los recursos del audiovisual público sean perennes y seguros, para que pueda hacer frente a sus necesidades conservando su independencia.

Es la elección que hemos hecho al basar su financiación en ingresos estables e identificados: el impuesto sobre las telecomunicaciones, que hemos aumentado en 0,3 puntos, y el canon, cuyo importe varía con la inflación, como está previsto por la ley, y que aumentará en 1€ el próximo año. Evidentemente, los organismos públicos de radiodifusión deben proseguir paralelamente los esfuerzos de gestión que han emprendido desde hace varios años y reforzar su cooperación.

Esta seguridad de los recursos no es incompatible con un impulso sobre los medios globales: el audiovisual público se beneficiará de una financiación en aumento de 16 M€ para 2016.

Preparar el futuro es asegurarnos de que nuestro modelo de arqueología preventiva, también reconocido y elogiado en todo el mundo, funcione con igual eficacia. Como ustedes saben, hemos querido reforzarlo mediante la ley. El Estado se hará especialmente garante científicamente de las excavaciones arqueológicas.

La presupuestación del canon sobre arqueología (RAP) por un importe de 118 millones de euros garantizará la estabilización de la financiación de las actividades de diagnóstico realizadas por el Instituto Nacional de Investigaciones Arqueológicas Preventivas (INRAP).

El impuesto seguirá siendo pagado por los promotores, pero se devolverá directamente al presupuesto general del Estado. Las colectividades territoriales que dispongan de servicios arqueológicos autorizados para la realización de diagnósticos se beneficiarán de una dotación estable y previsible, financiada directamente con cargo al presupuesto del Estado. Estos créditos garantizarán también un funcionamiento más regular del Fondo Nacional de Arqueología Preventiva (FNAP) para participar en la financiación de las excavaciones vinculadas a acondicionamientos de interés general.

Preparar el futuro es, por fin, preservar la inversión pública, que sigue siendo una palanca de desarrollo para la cultura y para los territorios. En 2016, los créditos que le consagramos alcanzarán así 524 millones de euros. Es un aumento del 1,4% con respecto a 2015.

El esfuerzo en favor de los monumentos históricos se mantendrá en 2016 por tercer año consecutivo. Las autorizaciones de compromiso aumentarán en 10 millones de euros con respecto a 2015, alcanzando los 338 millones de euros. Se trata de una señal fuerte que el Gobierno pretende enviar para apoyar la inversión en este ámbito. Y porque sabemos que los monumentos benefician al atractivo económico y al empleo en los territorios, este aumento se referirá en particular a los créditos desconcentrados.

Aclaro por supuesto que en 2016 se lanzarán o proseguirán otras obras en toda Francia. Pienso en particular en el sector de los archivos, que se enfrenta a una necesidad importante en materia de conservación y de accesibilidad, a la preparación del traslado de la Escuela Nacional Superior de Arquitectura de Marsella al futuro Instituto Mediterráneo de la Ciudad y de los Territorios, a los planes directores del Palacio de Versalles, de Fontainebleau, del Centro Pompidou y de la renovación de la BPI.

Se suele decir, queridos amigos, que un proyecto sin presupuesto no es un proyecto. Yo diría que lo contrario también es cierto: un presupuesto sin proyecto no es un presupuesto.

Sin prioridades asumidas, sin elecciones deliberadas, un presupuesto no es político, se contenta con ser gestor.

El que les presentamos hoy, que asciende a 7,3 mil millones de euros para 2016, es un proyecto político. La prueba concreta de que la cultura y los medios de comunicación son una de las principales prioridades del Gobierno en un momento difícil y exigente para nuestro país.

Es un acto de confianza, especialmente hacia los artistas y la juventud.

Ya se trate de los 2,9 millones de euros dedicados a la cultura y a la investigación, de los 3,9 millones de euros dedicados al audiovisual público, o de los 530 millones de euros destinados a la prensa, a la diversidad radiofónica, al libro y a las industrias culturales, cada uno cumple el mismo objetivo: hacer estallar los bloqueos que pesan sobre nuestra sociedad y sobre la creación, hacer que quienes experimentan un deseo de cultura - un deseo de hacer como un deseo de compartir - tengan la posibilidad de hacerlo, y sigan pudiendo hacerlo de nuevo en el futuro.

Le doy las gracias.