En los últimos días se han difundido informaciones erróneas relativas a la obra del Museo Picasso y a su próxima apertura. El Ministerio de Cultura y Comunicación desea recordar una serie de hechos.

En primer lugar, el Museo Picasso, establecimiento público nacional, es objeto desde hace cinco años de una renovación completa por un importe de 52 millones de euros. Además de 2 millones de euros de mecenazgo de competencia, estos trabajos son financiados por 19 millones de euros por el Estado mediante créditos presupuestarios y por 31 millones de euros mediante la elaboración de un programa cultural desplegado a partir del patrimonio nacional excepcional que constituyen las colecciones del museo. Al término de los trabajos, el museo podrá acoger a un público dos veces más numeroso que antes y presentará cerca de 400 obras en 37 salas de exposición.

Además de este esfuerzo financiero, la Ministra de Cultura y Comunicación recuerda que ha decidido personalmente la creación de 40 puestos, en un contexto presupuestario muy tenso, demostrando así su determinación y el compromiso del Estado con este proyecto y con su buena conducta. Las contrataciones están en curso, sin demora.

El proyecto, bajo la autoridad de la presidenta Anne Baldassari - conservadora general del patrimonio - y de sus equipos reviste para el Estado una importancia muy particular y la reapertura de un museo nacional, diseñado para albergar las obras de uno de los más grandes artistas del XXeme siglo, es un acontecimiento importante que merece entusiasmo y rigor.

En segundo lugar, por lo que se refiere a la fecha de apertura, ésta sólo puede determinarse respetando las normas aplicables a toda obra de construcción y los principios que sigue el Estado para la gestión de las colecciones de las que es responsable. A este respecto, deben reunirse tres condiciones: la seguridad de las colecciones, las condiciones de acogida del público y el buen funcionamiento de los equipos del museo.

Contrariamente a algunas alegaciones públicas, las obras realizadas en el cuerpo principal del museo, el Hotel de Salé, no se terminaron hasta el 30 de abril, como la empresa de obras encargada de la realización de la obra, Pradeau Morin había informado oficialmente al Ministerio. Además, las obras del ala técnica, edificio esencial del museo, se completarán como muy pronto a finales de mayo. La recepción de los trabajos relacionados con este ala técnica es, pues, absolutamente imposible antes del mes de junio.

A continuación, se abre una fase llamada de recepción de las obras. Todavía está en curso en el caso del Hôtel de Salé. La dirección de obra (Jean Francois Bodin et associes y Stephane Thouin, arquitecto jefe de los monumentos históricos) debe firmar un acta de las reservas no transmitidas hasta la fecha al Ministerio. Sobre la base de este acta, el organismo público, propietario del proyecto, bajo el control del Ministerio, deberá recibir el proyecto fijando un plazo que se dejará a la empresa para asegurar la retirada de las reservas. Sólo después de estas obras de recepción, que garantizan no sólo una apertura segura del museo sino también el buen uso de los fondos públicos, podrá organizarse la recepción técnica del edificio, la devolución de las obras, la formación de los supervisores y, por supuesto, la necesaria fase de "rodaje en blanco" del museo.

En el estado actual del avance de la obra, y al término del último comité de pilotaje, la propia presidenta del museo Picasso propuso una apertura no antes del 22 de julio. Habida cuenta de las incertidumbres que persistían en esa fecha, la Ministra de Cultura y Comunicación tomó la decisión de fijar la apertura del museo al público a mediados de septiembre.

Estas medidas - que son las únicas capaces de garantizar que el público, que debe ser la primera prioridad de todo museo, sea acogido en condiciones óptimas, son las que se utilizan en todos los museos públicos. La seriedad y la calidad de estas técnicas de gestión son reconocidas internacionalmente y constituyen un modelo.

Por último, la Ministra informó personalmente a la familia Picasso (Maya Picasso, Claude Picasso y Olivier Picasso) de la evolución del calendario. Más concretamente, Aurélie Filippetti recibió durante mucho tiempo a Claude Picasso el pasado 5 de marzo en el Ministerio y desde entonces se ha entrevistado varias veces por teléfono con él. En respuesta a denuncias falsas difundidas por la prensa en los últimos días, también se reunió con otros miembros de la familia.

Ninguna polémica desviará al Estado de su misión: proteger las obras del patrimonio de la Nación, ponerlas a disposición del público en buenas condiciones, garantizar las buenas condiciones de trabajo de los equipos y completar el proyecto de renovación de un museo cuya riqueza de sus colecciones y belleza no se verán afectadas de ninguna manera por una apertura en septiembre de 2014, tras una obra que ha durado más de 5 años. En efecto, cuál sería el interés o las motivaciones del Ministerio para obstaculizar la reapertura y el funcionamiento de uno de sus museos nacionales más populares. La Ministra de Cultura y Comunicación hace un llamamiento a todos para que superen los intereses personales y compartan ese entusiasmo y esa serenidad que permitirán la finalización del proyecto.