La Ministra se congratula también de la asociación exclusiva entre la fundación de empresa Hermès y la fundación Henri Cartier-Bresson, en torno al Gran Premio Internacional Henri Cartier-Bresson, de 2013 a 2017.
Patrick Faigenbaum nació en París en 1954. Enseña en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París y está representado por la galería Nathalie Obadia.
Pintor de formación pero fotógrafo desde hace más de treinta años, Patrick Faigenbaum se interesa ante todo por las caras. La cuestión del retrato, de la transcripción de lo real por el trazo, es central en su trabajo. Así se une a la obra de Henri Cartier-Bresson, el que sin duda nunca ha elegido entre la inmediatez de la fotografía y la del dibujo.
Si Patrick Faigenbaum se interesa por la ciudad, es ante todo por su población. Si muestra la arquitectura, es ante todo porque es el marco en el que se inscriben sus figuras. Sólo le interesa la representación del ser humano, más allá de su apariencia. Si sus primeros retratos de aristócratas italianos, en la época en que era pensionista en la Academia de Francia en Roma se unen a las cabezas antiguas que lo rodeaban; si sus recientes fotografías de los habitantes de Tulle, cuando la asociación Pueblo y Cultura le invita a trabajar en Corrèze, no parecen tan lejanas de las pinturas del Renacimiento, Patrick Faigenbaum no cuenta nada. Después de Édouard Manet, puede sin duda hacer suya esta frase: «He hecho lo que he visto.»
Creado por Robert Delpire en 1989, otorgado cada dos años sin distinción de edad o nacionalidad, el premio Henri Cartier-Bresson hace posible la realización de un proyecto fotográfico con sensibilidad documental.
Patrick Faigenbaum trabajará en la India en su proyecto «Kolkata» y reportará la exclusividad de sus imágenes a la fundación Henri Cartier-Bresson. Sus fotografías se exhibirán en 2015.