Con gran tristeza nos enteramos de la muerte, esta noche, de Jean-Philippe Quignon, co-presidente y co-programador del festival de los Viejos Arados de Carhaix, tras una larga lucha contra la enfermedad.
Apasionado de la música, había puesto su experiencia al servicio de las Viejas
Arados al unirse al equipo de voluntarios en 1998. Convertido en copresidente
en 2001, supo traer a las grandes estrellas de la escena
internacional en un pueblo en el corazón de Finisterre. De James Brown a Bob
Dylan, de Portishead a Justice, su programación siempre inesperada, su
gusto por las mezclas atrevidas ha contribuido en gran medida a hacer Viejo
Arados uno de los festivales más importantes y esperados del verano.
Su apuesta era loca: dar a cientos de miles de espectadores la
oportunidad de asistir a los conciertos de los más grandes en pleno Centro Bretaña,
sin desnaturalizar el espíritu solidario que fue el origen de la creación de las Viejas
Arados en 1992. Una apuesta exitosa que seguirá siendo un ejemplo y la
prueba de que la música y los festivales siguen siendo
eventos que reúnen en la misma emoción a los públicos más
diversos.
Este verano participó en el festival junto al equipo de los 5000
voluntarios.
Jean-Philippe Quignon, periodista del Telegrama, morlaisiano, estaba casado y
padre de tres hijos.
Nos asociamos a la pena de sus seres queridos y de todos los que han tenido la
la oportunidad de conocerlo algún día.