El Presidente de la República, en presencia de Bruno Le Maire, ministro de Economía, Finanzas y Reactivación, y de Roselyne Bachelot, ministro de Cultura, se reunió el jueves 27 de agosto, con los profesionales del sector de la prensa miembros de la Alianza de la Prensa de Información General.

 

El sector de la prensa se ha visto particularmente debilitado en los últimos meses. A la crisis sanitaria se añadió la de la distribución de la prensa impresa vendida en el número.

 

Se han adoptado medidas de urgencia para garantizar la continuidad de la distribución de la prensa y apoyar a los actores más afectados (comerciantes de periódicos, títulos ultramarinos, editores). Inscritas en la ley de finanzas rectificativa (votada el 30 de julio de 2020), representan 106 millones de euros y se añaden a las medidas transversales al conjunto de la economía a las que también han recurrido los agentes del sector.

 

Pero el reto es también consolidar el futuro de la prensa, que se enfrenta a la crisis más estructural de su modelo. Por ello, el Estado ha querido poner en marcha un ambicioso plan de sector, dotado de 377 millones de euros durante los dos próximos años.  Este plan de reactivación tiene por objeto acompañar las transiciones ecológicas y digitales del sector, pero también reafirmar el compromiso del Estado con una prensa libre, independiente y pluralista, lo que es vital para nuestra democracia.

 

Este camino a largo plazo pasa por un apoyo masivo a la inversión. Así, los créditos del Fondo Estratégico para el Desarrollo de la Prensa se incrementarán considerablemente para un total de 50 millones de euros y se pondrá en marcha un plan de transformación de las imprentas por un importe de 18 millones de euros al año.

 

Para defender el pluralismo de la prensa, se decidió instaurar un crédito fiscal para las suscripciones a la prensa de información política y general (a un coste anual de 60 millones de euros para las finanzas públicas) y crear dos nuevas ayudas al pluralismo para los servicios de prensa en línea y los títulos ultramarinos.

 

Para acompañar la construcción de un modelo económico sostenible para el futuro, el Estado seguirá comprometiéndose, tanto a nivel nacional como europeo, para la correcta aplicación del derecho vecino de los editores de prensa y para una mejor regulación del mercado de la publicidad en línea.

 

Por último, los retos medioambientales y sociales deberán figurar en el centro de esta transformación. Se crearán fondos específicos para apoyar la transición ecológica de la prensa y reducir la precariedad en el sector.

 

Este plan de recuperación debe permitir a la prensa hacer frente a la crisis actual, preparando al mismo tiempo su futuro. Implicará el pleno compromiso de todos los agentes del sector.

 

Anexo

 

      I.        Medidas de emergencia por un importe de 106 millones de euros en 2020 (además de las medidas transversales)

Desde el inicio de la crisis, los actores del sector se han beneficiado de los dispositivos transversales de apoyo a la economía como el préstamo garantizado por el Estado (PGE) o el fondo de solidaridad. Los préstamos de tesorería y las garantías bancarias del IFCIC (Instituto de Financiación del Cine y de las Industrias Culturales), cuyos medios se han reforzado (105 millones de euros para el conjunto de los medios de comunicación y las industrias culturales) y cuyas herramientas fueron abiertas al conjunto de los títulos de prensa, también se movilizaron.

 

El año 2020 también estuvo marcado para el sector de la prensa por la crisis de la mensajería Presstalis, concomitante a la crisis sanitaria vinculada a la epidemia de Covid-19.

 

El Estado ha hecho todo lo posible para garantizar la continuidad de la distribución de la prensa. En primer lugar, permitiendo a los vendedores de periódicos permanecer abiertos, como comercios esenciales para la vida de la Nación, a continuación aportando un apoyo financiero de gran amplitud (76 millones de euros) para garantizar la continuación de la actividad de Presstalis hasta el 1er julio de 2020, por último, mediante el pago a los beneficiarios de ayudas a la prensa de anticipos sobre las subvenciones de 2020.

 

Por otra parte, en julio de 2020 se adoptaron medidas de urgencia en la ley de finanzas rectificativa para apoyar a los actores más frágiles del sector hasta un importe de 30 millones de euros: una ayuda para apoyar a los comerciantes de periódicos, agentes centrales de la democracia y la cohesión de los territorios
(19 millones de euros)  ; una ayuda para los editores de información política y general (IPG) más debilitados por la liquidación de Presstalis (8 millones de euros) y una ayuda para los títulos de IPG de ultramar (3 millones de euros).

 

 

    II.        Un plan de recuperación para la prensa, dotado con 377 millones de euros hasta 2022, estructurado en 5 ejes

El plan de recuperación viene a completar este apoyo con el fin de acompañar la transformación estructural del sector en la era digital en torno a cinco ejes:

 

1. Fomentar la suscripción y reforzar las ayudas al pluralismo

 

- Se establece un crédito fiscal sobre las suscripciones a la prensa de información política y general, con el fin de beneficiar a los nuevos abonados de una reducción fiscal del 30 % del importe de la suscripción. Esta medida, cuyo coste anual se estima en 60 millones de euros[1]está destinada a reconstituir el público de los títulos de prensa, cuyos ingresos de suscripción representan los recursos más duraderos.

 

- Como complemento de las ayudas al pluralismo existentes, reservadas a los títulos en papel, se instaurará una ayuda perenne en favor de los servicios de prensa en línea de información política y general, por un importe de 4 millones de euros al año.

 

- Se creará una ayuda permanente destinada a los títulos de prensa de ultramar, por un importe de 2 millones de euros al año, a partir de 2021.

 

2. Acompañar la reforma industrial y la transición ecológica del sector de la imprenta

 

- El fondo de transformación de las imprentas de la prensa regional estará dotado de 18 millones de euros al año, con el fin de permitir a las estructuras industriales adaptarse a la disminución continua de los flujos.

- 5 millones de euros ya se han votado en leyes de finanzas rectificativa para iniciarlo.

 

- Se crea un fondo para la transición ecológica (8 millones de euros al año) para financiar proyectos de inversión multiactor con el fin de reducir la huella de carbono del sector y para acompañar el fin del eco-fincontribución en especie de que disfrutan actualmente los editores.

 

 

3. Reformar en profundidad el sector de la distribución.

 

- La reestructuración de Presstalis se tradujo en la reanudación parcial de su actividad por los diarios nacionales de información política y general, accionistas únicos de France Messagerie.  El Estado aportó una financiación de 80 millones de euros para poner en marcha la sociedad de distribución, cubrir sus necesidades de tesorería y permitir completar la reestructuración de la empresa. Ahora corresponde a los editores garantizar la viabilidad de su instrumento de distribución.

 

- El transporte postal de la prensa, que se ha vuelto insostenible debido a la erosión de los volúmenes, debe también reformarse, mediante una mejor articulación entre portaje y correo.

 

- Por último, el importe de la ayuda a la modernización de las emisoras de prensa se duplicará (+ 6 millones de euros/ año) Esta medida debería permitir a la red reforzar su atractivo y responder mejor a las expectativas de los lectores. También pretende reforzar la cohesión de los territorios frente al importante papel que desempeñan los vendedores de periódicos a escala local.

 

4. Transformar los modelos empresariales y fomentar la innovación.

 

- El Fondo estratégico para el desarrollo de la prensa del Ministerio de Cultura (inicialmente dotado de 16,5 millones de euros), herramienta bien conocida del sector, único en Europa, que permite subvencionar los gastos de inversión de los editores y de las agencias de prensa, ve sus créditos abundantes por un importe de 25 millones de euros al año, al mismo tiempo que se ha iniciado una gestión de simplificación de los procedimientos y concertada con el sector.  Ya se han aprobado 5 millones de euros en la Ley de finanzas rectificativa para el año 2020.

 

- También se creará un fondo de lucha contra la precariedad, dotado de 18 millones de euros al año, para acompañar a los actores más frágiles de la profesión (freelance, fotoperiodistas, dibujantes de prensa...) en este período de transformación.

 

5. Mejorar las condiciones de competencia con las plataformas digitales, de las que depende la salvaguardia de los ingresos publicitarios de la prensa

 

-                   Instaurar un derecho afín de los editores y agencias de prensa

Con la adopción de la Ley nº 2019-775 de 24 de julio de 2019, Francia fue el primer país en transponer a su legislación nacional la Directiva sobre derechos de autor y derechos afines de 17 de abril de 2019. Su objetivo es establecer las condiciones para una negociación equilibrada entre, por una parte, los editores y agencias de prensa y, por otra, las plataformas digitales, con el fin de redefinir, en favor de los editores y agencias de prensa, el reparto de valor entre estos actores. Confiere a los editores y agencias de prensa el derecho de autorizar o prohibir la reproducción de sus publicaciones por las plataformas digitales.

Francia está ahora especialmente atenta a la correcta aplicación de la nueva legislación sobre el derecho vecino.

 

-                   Regular la dominación de los gigantes de Internet en el mercado de la publicidad digital

La concentración de los ingresos publicitarios en manos de actores digitales cada vez más poderosos amenaza la perennidad de los medios de comunicación tradicionales y, por consiguiente, el acceso de los ciudadanos a diversas fuentes de información, esenciales para el debate democrático y la diversidad cultural.

En este contexto, parece esencial replantearse la regulación publicitaria en la era digital. Se ha lanzado una misión interministerial que debe analizar y poner de relieve los impactos de las grandes evoluciones en curso en el sector de la publicidad digital. Esta misión, cuyo informe se espera para el otoño de 2020, propondrá también al Gobierno vías para revisar la regulación de este sector, tanto a nivel nacional como europeo.

 

 

En total, además del refuerzo de los dispositivos IFCIC y de las medidas transversales, se movilizan 483 M€ para apoyar el sector (106 M€ para las ayudas de urgencia movilizadas en 2020 y 377 M€ para las medidas de relanzamiento 2020-2022). Permitirán ayudar a la prensa escrita a hacer surgir nuevos modelos indispensables para la calidad del debate democrático en la era de las redes sociales y de la manipulación de la información.  Estas ayudas se añadirán a los dispositivos de ayuda existentes, que representan en 2020 más de 840 millones de euros.

 

A cambio de este apoyo consecuente, el Estado espera por parte de los editores de prensa que se muestren ejemplares en materia de transición ecológica, paridad y diversidad, pero también de lucha contra la precariedad de las profesiones más frágiles del sector (corresponsales, fotoperiodistas, corresponsales locales de prensa, vendedores ambulantes, etc.).