Nos reunimos esta noche para descubrir, al final de los dos días de trabajo realizados por los miembros del jurado de esta nueva sesión, a los ganadores de los «Álbumes de jóvenes arquitectos y paisajistas».
Como ustedes saben, este sello se creó hace 30 años y una vez cada dos años pretende dar toda la visibilidad que merecen a jóvenes talentos, arquitectos o paisajistas, franceses o extranjeros. Por ello, mi Ministerio, consciente de la gravedad de su desaparición, ha querido reactivarlo.
Más que una simple recompensa, este premio es un reconocimiento. Está allí para designar el relevo a los promotores de hoy, la joven guardia que responderá a los desafíos del mañana y en particular el de la calidad de nuestro entorno de vida, del que será el «Gran París» y todos los demás proyectos que inspirará necesariamente, Creo que sí, el crisol. Responsabilidad, conciencia, pero también innovación, este premio tiene por objeto identificar estas cualidades esenciales y dar a una carrera que aún está en sus comienzos el pequeño impulso y el impulso si no suficientes, por lo menos necesarios para su realización, especialmente en un contexto económico que no es tan favorable como podríamos desear.
Quisiera aprovechar también esta ceremonia para decirles, o para reiterarles, toda la importancia que atribuyo a los arquitectos y a la arquitectura.
He querido darles un lugar muy especial en la nueva organización de mi ministerio nombrando un director específicamente encargado de la arquitectura.
Juan GAUTIER, a quien la mayoría de vosotros ya conocéis, ocupa esta función ante Felipe BELAVAL, de quien es adjunto, en el seno de una gran «dirección general de los Patrimonios». Ambos tienen, como saben, mi plena confianza.
Este lugar central de la arquitectura es para mí esencial porque estoy convencido, sobre todo en vista de los cambios actuales, de que la calidad de nuestra vida juntos en el espacio y en la ciudad debe ser nuestra prioridad. Por eso es muy importante que la arquitectura sea el punto focal de esta exigencia. El arquitecto solo me parece capaz de encarnar la fuerza de síntesis capaz de conciliar los retos a menudo competidores del desarrollo sostenible - retos que afectan a la vez a la economía, a lo social, al medio ambiente y, por supuesto, a la cultura. Todos conocemos, en efecto, las amenazas que pesan hoy sobre nuestros territorios una urbanización demasiado a menudo anárquica, sin visión de conjunto. Nuestro deber, como Ministro de Cultura, es precisamente velar por la calidad de un tejido urbano y paisajístico que tanto ha contribuido al atractivo de nuestro territorio y que garantiza una calidad de vida y de vida juntos hasta ahora única en el mundo.
Por ello, deseo que el Taller Internacional del Gran París, recientemente instalado en el Palacio de Tokio y que pronto será inaugurado por el Presidente de la República, sea un lugar de intercambio y de creatividad abierto a todos los talentos, en particular a los jóvenes.
Por eso me complace mucho hoy entregar este sello «álbumes» a los jóvenes profesionales que sois, arquitectos por sexta vez, a los que desde hace tres sesiones se han unido jóvenes paisajistas particularmente prometedores.
Esta ceremonia no es un «hapax», esas palabras raras que solo se encuentran una vez en los textos antiguos... Por el contrario, se inscribe en una línea continua de acciones y manifestaciones que afirman y confirman mi compromiso y el de mi ministerio en favor de la arquitectura. Pienso, en primer lugar, en el Gran Premio Nacional de Arquitectura, cuyo ganador me complace proclamar a finales de este año. Pienso en los numerosos «Encuentros del Gran París» que en el año 2009 han sido escenario de conferencias a menudo estimulantes tanto en París como en las regiones. Quiero evocar también las Bienales internacionales de arquitectura y muy especialmente la de Venecia, cuya comisaría del pabellón francés encomendamos al arquitecto Dominique PERRAULT, al que ayer entregué el premio «Creador sin fronteras 2010». Por último, quiero hablar de la Exposición Universal de Shanghai, para la que, como saben, el arquitecto Jacques FERRIER realizará el pabellón francés. Todo esto dibuja una continuidad no solo en la política que se lleva a cabo, sino también entre las generaciones de arquitectos y paisajistas.
Por otra parte, aprovecho esta ocasión para reiterarles también lo importante que es, en mi opinión, dar a nuestros conciudadanos, que son los protagonistas del marco de vida cotidiano, en particular a nuestros jóvenes conciudadanos, una conciencia aguda y activa del papel que les corresponde en la valorización y elaboración de la ciudad del siglo XXI. Nos encontramos hoy, Internet lo demuestra de manera clamorosa, en un paradigma que sitúa la participación de cada uno en el centro de los desafíos de todos y, en particular, de las cuestiones urbanas. Estamos en una era de interactividad, es decir, de responsabilidad compartida. Esto es también «la cultura para cada uno»: una cultura donde «cada uno lleva en sí la forma entera de la condición urbana», parafraseando la palabra de MONTAIGNE.
En el marco de esta responsabilidad de cada uno, el Presidente de la República estableció, a partir de 2007, la educación cultural como una de las principales prioridades de la política educativa de nuestro país. La educación artística y cultural no es un lujo. Es un verdadero reto de sociedad que compromete no solo nuestra entrada en la «economía del conocimiento», sino también la calidad de nuestra vida juntos, especialmente en las metrópolis del siglo XXI.
Por eso, aprovecho la presencia de jóvenes laureados para llamar hoy al conjunto de la profesión a contribuir, cada uno a su medida y a su manera, y con toda la energía de que dan prueba diariamente, a la formación cultural de los jóvenes ciudadanos del mañana. Algunos estudiantes de nuestras escuelas nacionales superiores de arquitectura ya están involucrados en esta aventura. Algunos profesionales experimentados también han tomado la medida de esta exigencia y han aceptado el reto. La obra es inmensa y no puede prescindir de ninguna fuerza, es decir, necesita a cada uno de vosotros.
Quizás piensen que soy como esos profesores veteranos que posponen la entrega de las copias para asegurarse de que su público esté atento... Por tanto, antes de pasar a la entrega de estos premios, permítanme abordar un punto aparentemente ajeno a lo que nos une hoy, pero que, en el fondo, no lo es en absoluto, y que me preocupa, como creo, a cada uno de ustedes, especialmente a corazón.
Quisiera evocar la actualidad que ha marcado de manera trágica las semanas pasadas, y quería saludar la notable acción de la Fundación de los Arquitectos de la Emergencia en Haití y, lamentablemente, hoy también en Chile. Estos arquitectos trabajan con competencia, paciencia y empeño, al servicio - y al socorro - de las poblaciones, para hacer el balance sanitario de los edificios, elaborar proyectos de ayuda a la reconstrucción de centros hospitalarios, de escuelas o de viviendas... Este es también el desafío social, el desafío humano y moral de la arquitectura, la dimensión humanista que está en el fundamento de este oficio.
Quiero saludar una vez más el compromiso de Patrick COULOMBEL, presidente de la Fundación de Arquitectos de la Emergencia, que debía formar parte de este jurado de los Álbumes de los Jóvenes Arquitectos, pero que los acontecimientos han llevado en este momento a Chile. Está representado aquí por el señor JUSTIN, arquitecto y miembro de esta Fundación, a quien quiero asegurar una vez más mi apoyo.
Pasemos ahora a nuestras «copias», o más bien a nuestros «álbumes». Y rindamos primero a los jurados que se reunieron ayer y hoy bajo la presidencia de Pascal CRIBIER para los jóvenes paisajistas, y de Christian HAUVETTE, gran premio nacional de la arquitectura, para los jóvenes arquitectos, así como de Jean GAUTIER. Se examinaron hasta 216 solicitudes de arquitectos y 18 de paisajistas. He pasado hace un momento por la sala de deliberaciones y he podido comprobar con qué rigor y con qué entusiasmo los miembros del jurado han querido realizar esta difícil selección entre todos estos talentos.
También quisiera dar las gracias a los aproximadamente 100 expertos que han dedicado un tiempo precioso a examinar, antes del jurado, los expedientes de los candidatos, a fin de garantizar una total equidad.
Los ganadores, cuyos nombres anunciaré en breve, son 15: 12 jóvenes arquitectos y 3 jóvenes paisajistas. Sus trabajos se presentarán, a partir del próximo 10 de junio, en la Cité de l'architecture et du patrimoine, socio esencial de los AJAP (álbumes de jóvenes arquitectos y paisajistas). En octubre, la exposición será itinerante en Francia, y más allá de nuestras fronteras, gracias a la doble colaboración de los servicios del Ministerio de Cultura y Comunicación con la Cité de l'architecture et du patrimoine, así como con la agencia Culturesfrance.
Estoy seguro de que los jóvenes talentos premiados hoy aprovecharán el apoyo del Círculo de Patrocinio, cuyos miembros saludo aquí, para integrarse plenamente en la vida de la arquitectura y del paisajismo contemporáneos.
También quiero expresar a aquellos que han hecho la audaz elección de la confrontación, y cuyos nombres no estarán en la lista de los jurados, toda mi simpatía y calurosos ánimos por la continuación de sus viajes. Competir es testimoniar ya su valor, su implicación y el amor que se siente por su oficio. A los laureados que pronto conoceremos, les expreso mis sinceras felicitaciones y mis mejores deseos para que no sea más que un primer capítulo, y para que escriban aún muchas páginas hermosas en los álbumes de la arquitectura y del paisaje del mañana.
Después de la «declamación», ¡coloca ahora (¡por fin!) la proclamación!
Llamo ahora a los ganadores de este período de sesiones 2009-2010 e invito a unirse a mí:
12 equipos de arquitectos:
Julien ABINAL de la agencia ABINAL & ROPARS
ES-CE ASÍ/ Xavier WRONA
FÁBRICAS ARQUITECTURAS PAISAJES/ Pierre JANIN y Rémi JANIN
FREAKS FREEARCHITECTS/ Guillaume AUBRY, Cyril GAUTHIER e Yves PASQUET
Ilham LARAQUI de la agencia LARAQUI - BRINGER ARCHITECTURE
Stéphane MALKA
NP2F/ François CHAS, Nicolas GUERIN, Fabrice LONG y Paul MAÎTRE-DEVALLON
OLGGA ARCHITECTES/ Guillaume GRENU, Nicolas LE MEUR y Alice VAILLANT
Julien PERRAUD del TALLER RAUM ARCHITECTES
Thomas RAYNAUD
Stéphanie VINCENT
Emmanuelle WEISS
3 equipos de paisajistas:
A+R SALAS PAISAJISTAS/ Amélie SALLES y Rémi SALLES
PRAXYS/ Thomas BOUCHER
Marion VACONSIN