Frédéric Mitterrand, ministro de Cultura y Comunicación, ha decidido abrir una nueva sala en la Comédie-Française, acondicionada en los espacios libres destinados inicialmente a la sala modulable de la Ópera de la Bastilla, en 1989.

Estos espacios constan de un vestíbulo, con acceso directo y
independientes, con una superficie adecuada para albergar una sala de espectáculos y
equipamiento escénico y, por último, espacios laterales en siete niveles,
que puedan adaptarse a los artistas y técnicos de la
Comédie-Française.

Un proyecto consistente en la realización de una sala, concebida como un lugar de
trabajo y representaciones modulables, se llevará a cabo para este volumen.
En respuesta al deseo de larga data expresado por Muriel Mayette, administradora
general de la Comédie-Française y los Comediantes franceses, permitirá un
trabajo artístico diversificado, complementario al presentado en la sala
Richelieu y satisfacer las exigencias de las escrituras contemporáneas. El
Los estudios se iniciarán en 2012.

Paralelamente, se lleva a cabo una reflexión para la realización de una segunda sala
ensayos para la Ópera de la Bastilla, completando la sala de ensayo ya
existente para la orquesta, destinada a responder a los problemas de
flujos tensos de sus espacios de trabajo.

Esta decisión ha dado lugar a una estrecha concertación con la Comédie-
Francesa y la Ópera Nacional de París, concertación que continuará todo el
largo de los estudios venideros.