Homenaje de Frédéric Mitterrand, ministro de Cultura y Comunicación, a Ricet Barrier
Una voz francesa del music hall acaba de irse.
Maurice-Pierre Barrier, conocido como el escenario de Ricet Barrier, experimentó el
éxito a finales de los años 50 en los escenarios parisinos, La Servante du
Castillo, coronado por el premio de la Academia del Disco. Los Hermanos Jacques
contribuyen a la fama de este cantante de humor jovial, adepto de la
fórmula y la palabra correcta.
En más de 40 años de carrera, este admirador de Félix Leclerc, este humorista del
diario vistió la canción de risa y fantasía. Su tono gracioso y
alegre contribuyó a encantar a los más jóvenes, cuando prestó su voz a los
«Aventuras de Saturnino» el pato y a la exitosa serie «Barbapapa».
Su carrera muestra cómo la canción es un patrimonio que acuna
memorias y nos acompaña en todas las edades de la vida.
Ricet Barrier fue ese payaso alegre y burbujeante que daba fuerza a la libertad de
Grandes y pequeños sueños.