En mi audiencia ante la Asamblea Nacional el 19 de marzo de 2024, mencioné el cierre de escuelas de arte territoriales no como un objetivo sino como un riesgo si el conjunto de los socios no se movilizan.
Estas escuelas fueron fundadas hace muchos años por las ciudades donde están establecidas. El Ministerio de Cultura los acompaña y nunca ha faltado su apoyo - este apoyo ha aumentado un 14% en los últimos diez años. Estas escuelas, al igual que las escuelas nacionales, han sido completamente preservadas en las recientes anulaciones de créditos, y están en el centro de mi reflexión para el futuro.
Lugares de formación únicos, tienen una utilidad social demostrada, acompañando a un gran número de estudiantes de su región, becarios, pero también a habitantes que vienen a asistir a cursos públicos, o a profesionales en formación continua.
Al mismo tiempo, sufren una situación de gran fragilidad, e incluso de crisis aguda para algunas de ellas, cuyos factores son múltiples.
Lo que deseo para la enseñanza superior cultural es ante todo que responda a tres objetivos:
- Equidad territorial e igualdad de acceso
- Excelencia en la formación y profesionalización
- Atención a las condiciones de aprendizaje y de vida estudiantil
Ministro de Cultura, no quiero responder a la crisis de las escuelas de arte territoriales, ni con una estrategia genérica que ignorara los detalles de las situaciones, ni con respuestas únicamente de urgencia que no resolverían las cuestiones de fondo hoy planteadas.
Necesitamos un servicio público de educación cultural superior, y las escuelas de arte territoriales desempeñan un papel clave en este sentido. Juntos podremos mantener y fortalecer ese papel.
Rachida DATI,
Ministro de Cultura